Bajo una fuerte lluvia y con una afición estática, se llevó a cabo el cuarto festejo de la Feria de Manizales, en Colombia, donde el torero local José Arcila conquistó el ruedo a base de tesón y hambre de triunfo.
Es importante destacar las pocas oportunidades que los toreros colombianos tienen dentro y fuera del país, donde los festejos taurinos cada vez son menos frecuentes, dificultando la constancia en sus carreras. Sin embargo, este miércoles, Arcila demostró sitio y técnica en una tarde complicada.
Se lidiaron toros de la Ganadería Las Ventas del Espíritu Santo, bien presentados y con edad, pero faltos de fuerza. En su mayoría mostraron mansedumbre desde su salida, aunque destacó el cierra plaza, un cinqueño que, bajo la incesante lluvia en el albero, permitió el juego y mostró nobleza y transmisión.
RESULTADOS DEL FESTEJO:
- José Arcila: Oreja y oreja (salida a hombros).
- Miguel Ángel Perera: Silencio y silencio.
- Daniel Luque: Silencio y silencio.
José Arcila logró construir una faena a un toro descastado y manso, sacando agua de las piedras. Con temple y técnica, lo metió a la muleta y, tras una certera estocada, cortó la primera oreja de la tarde.
En el último toro de la corrida, Arcila estructuró una faena a base de templadas tandas con hondura en los medios. Una estocada certera le aseguró otro apéndice y la salida a hombros.
Por su parte, Miguel Ángel Perera buscó lucimiento con su lote, pero la mansedumbre de los toros dificultó sus lidias. Aunque voluntarioso con el cuarto toro, las fallas con el estoque y los múltiples intentos de descabello disiparon cualquier oportunidad de triunfo.
Finalmente, Daniel Luque intentó con torería hilvanar una faena al segundo toro, que terminó viniéndose a menos debido a la mansedumbre del astado. Con el quinto de la tarde, optó por abreviar y dejó una gran estocada para cerrar su presentación.
La Feria de Manizales reafirma su importancia en el calendario taurino, destacando la entrega y técnica de figuras locales como José Arcila.